Mi gente! Un placer para mí servir a la comunidad. Como mujer latina e inmigrante, estoy más que familiarizada con todas las dificultades y problemas que enfrentamos en este país. No es fácil empezar de cero, dejar todo atrás y reinventarse en una cultura donde ni siquiera pueden pronunciar tu nombre. La nostalgia se vuelve nuestra prima hermana y el desarraigo el pan nuestro de cada día. Rupturas, distancia, despedidas, añoranza, y sobre todo DEMASIADO trabajo. Para qué? Para que ni el signo de interrogación (al inicio de la oración) salga en el teclado.
“Como psicóloga, yo ayudo a otras mujeres Latinas que se sienten desesperanzadas, crear un plan para el éxito en las relaciones interpersonales y en la vida en los Estados Unidos.”
Yo estudié psicología en La Universidad de La Habana, Cuba y cuando emigré a los Estados Unidos, decidí continuar mi vocación y completé el doctorado en psicología clínica en La Universidad Carlos Albizu, Miami Campus (honrando a la isla del encanto). Basada en mi historia de vida, me especialicé en salud mental de inmigrantes y latinos. Especialización que completé en hospitales de puntería afiliados a Harvard Medical School. Me morí de frío en Boston y regresé al sur, a fundar mi práctica bilingüe especialmente para ti.